• PARA QUÉ PLANIFICAR

Primero, vamos a trabajar sobre tu mentalidad entendiendo para qué es necesaria la planificación en tu negocio: ¿Qué aporta para lograr el éxito de tu emprendimiento? Viendo clara su importancia es como vas a vencer esa primera barrera de nunca encontrar tiempo en tu ocupada agenda para esta tarea.

Además te vamos a acompañar a descubrir cuál es tu visión para mantenerte siempre motivada.

• PLANIFICAR CADA TRIMESTRE

¡Divide y triunfarás! Para conquistar tu año necesitás fraccionarlo en bloques más pequeños. Pero antes de hacerlo, vas a entender por qué es necesario dividir tu año en trimestres y asignarle, a cada uno, un gran evento que paso a paso se va a hacer realidad.

• PLANIFICACIÓN MENSUAL

Vamos desglosando en tareas cada vez más chiquitas. Así, ese año que parecía enorme e imposible, se vuelve más tangible con tareas pequeñas y estratégicas.

Suena muy lindo a excepción de que estás recordando que lo hiciste mil veces y nunca funcionó. Para que esta vez sí funcione primero, antes de planificar nada, vamos a descubrir cuál es tu estilo de planificación: ese con el que te sentís cómoda y sentís que lo podés cumplir.

Para trazar nuestro plan de acción, nos van a guiar los objetivos de venta, de comunicación y de aprendizaje.

• ENTRAR EN ACCIÓN

Ahora sí vamos a identificar las acciones semanales que tienen que suceder sí o sí para alcanzar tus metas.

Pero como sabemos lo que cuesta arrancar, también vas a aprender cómo impulsarte a accionar. Al contrario de lo que creemos, la energía no es algo que tenemos o no. Vas a descubrir que la energía se crea. Vas a aprender estrategias de cómo hacerlo para cumplir con lo que te comprometiste.